En ocasiones tenemos una joya guardada en un cajón o vamos a comprar una pieza en un sitio que no conocemos y no tenemos la certeza de si el material con el que está fabricada la pieza es oro auténtico o no.
Para todas estas situaciones te traemos este artículo, en el que te ofrecemos distintos métodos para comprobar la autenticidad del oro de las joyas
Busca el sello indicativo de pureza
Esta prueba no es definitiva, pero puede ayudarnos a tener una primera impresión de la fiabilidad de la joya que estamos comprando. A la hora de comprar cualquier joya de oro deberemos buscar un sello con tres cifras. Este sello es un indicativo de la pureza del metal y suele ir acompañado de otra marca formada por tres cifras y dos letras que nos indicará el código del fabricante.
Usa un imán
Este método es muy sencillo de emplear. Para comprobar una joya simplemente pásale un imán, el oro es un material no magnético, de forma que si la joya se ve atraída hacia el imán tendremos la prueba indiscutible de que la joya que estamos intentando comprar no es de oro.
Frótalo contra cerámica
Si tienes un plato de cerámica sin esmaltar podrás comprobar fácilmente si tu joya es realmente de oro. Para realizar esta prueba simplemente frota la pieza contra el plato, si al realizar este frote la pieza deja un rastro de color dorado estaremos ante una pieza de oro, mientras que si el rastro dejado por la joya es negro no será oro.
Emplea ácido nítrico
El ácido nítrico es una sustancia química altamente corrosiva y que puede resultar peligroso si no se maneja con cuidado. Para comprobar la autenticidad del oro simplemente deberás sumergir la joya en esta sustancia. Si se pone verde es que está hecha de otro metal, si se pone blanquecina está hecha de plata bañada en oro y si no cambia la pieza estará hecha de oro.
Lleva la joya a un taller de joyería
Si buscas cerciorarte al 100% de la composición de tus joyas, llévalas a un taller de joyería. Allí emplearán un método conocido como piedra de toque.
Este método consiste en frotar la pieza con una piedra de un material poroso al que se quedan adheridas pequeñas partículas de la composición de la pieza. Una vez obtenida la muestra, el joyero la introduce en una solución química que deshace todos los materiales, pero deja intacto el oro.
Esperamos que las técnicas de este artículo te sean de gran utilidad a la hora de comprobar la autenticidad de tus joyas.